Hace unos días, el Instituto de Agricultura Sostenible (IAS) recibió la visita de un grupo de investigadores del Departamento de Física y Geografía de la Universidad de Trier (Alemania). El equipo, coordinado por el investigador asociado y estudiante posdoctoral Thomas Iserloh, ha conocido in situ las características y el funcionamiento del simulador de lluvia que dispone el centro. La visita se encuadra en un proyecto internacional en el que este equipo está comparando pequeños simuladores de precipitación de centros de toda Europa.
El estudio, auspiciado por la Fundación Alemana para la Investigación (DFG), pretende recopilar datos para mejorar la comparabilidad y la fiabilidad de los resultados y conseguir la estandardización máxima en relación con los métodos de calibración. Concretamente, realizaron pruebas de calibración, midiendo parámetros como la cantidad lluvia precipitada, el tamaño de las gotas o su velocidad de caída, así como la distribución espacial del agua en el área de la cubierta. Todo ello para estudiar los procesos y el impacto de la erosión del suelo producido por lluvia.
Según estos expertos, las diferencias en las construcciones de estos dispositivos (altura, dimensiones del diagrama, longitud, etc) así como de sus parámetros (referidos a la lluvia artificial generada) hacen difícil realizar estimaciones de la erosión a escala global. Por otro lado, también han observado que los diferentes grupos de trabajo analizados emplean estrategias de la calibración muy diferentes unas de otras.
Consideramos que los resultados de este estudio pueden ser muy importantes ya que, gracias a ellos, ahora disponemos de información explícita sobre los diversos parámetros de los simuladores disponibles, lo que a su vez nos permite hacernos una idea más clara del grado de la erosión del suelo en Europa, aclara este investigador alemán.
Durante los dos viajes que han realizado a nuestro país, este equipo ha visitado los grupos de trabajo de las universidades de Zaragoza, Málaga y La Rioja. Asimismo, han estado en otros centros del CSIC, como la Estación Experimental de Zonas Áridas (EEZA) en Almería; la Estación Experimental del Zaidín (EEZ), en Granada; o el Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS), en Murcia. Hemos disfrutado mucho trabajando con los compañeros españoles: son gente amable y dedicada, aseguró Iserloh tras su visita, quien no desdeña la posibilidad de llevar a cabo futuras colaboraciones hispano-germanas en este campo.
Poster del proyecto
Artículos relacionados del mismo autor